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La actriz Stormy Daniels declaró en el juicio contra Trump

Por Walter Calabrese

Por primera vez desde que se inició la causa se encontraron cara a cara la actriz de cine para adultos y el ex presidente norteamericano. En el estrado, Daniels aseguró a los miembros del jurado que mantuvo un encuentro sexual no deseado con Trump en el año 2006, y que más tarde le entregaron 130.000 dólares para que se mantuviera en silencio durante la campaña electoral por la presidencia en 2016.

En su testimonio, Daniels contó cómo había conocido a Donald Trump en un torneo de golf de celebridades en Lake Tahoe, en Nevada. Luego la invitó a cenar en la suite de su lujoso hotel, en donde presuntamente tuvieron un encuentro íntimo. La actriz describió el momento aduciendo que el magnate se comportó groseramente y con arrogancia. También relató que mantuvieron varias conversaciones después ese encuentro, pero no tuvieron otros encuentros con sexo.

Para la fiscalía, el testimonio de Daniels es vital para esclarecer la presunta falsificación de registros comerciales de su corporación inmobiliaria, la Organización Trump, para ocultar el pago de los 130.000 que entregó su ex abogado y asesor Michael Cohen.

Por otra parte, el abogado defensor del ex presidente, Todd Blanche, pidió la anulación del juicio luego de escuchar el testimonio de Daniels, que por momentos rozó lo amarillista. No obstante, el juez de la Corte Suprema de Nueva York, Juan Merchan, mencionó que aunque hubiera preferido no escuchar un relato tan pormenorizado de los hechos, denegó la solicitud de la defensa. Durante la jornada del juicio Trump escuchó con atención y serenidad el relato de Daniels, y en una ocasión les susurró algún comentario a sus abogados.

Trump niega haber tenido un encuentro con la actriz Daniels

Una parte del relato de Daniels produjo cierta tensión en la sala, fue cuando dijo que le preguntó por su esposa, Melania Trump, con quien estaba casado desde el año anterior, y que el ex mandatario le respondió que eso no era motivo de preocupación, porque los dos “ni siquiera dormían en la misma habitación”.

Entrando en la cuarta semana del juicio, los testigos que presentó la fiscalía han contado al jurado de 12 miembros historias de intimidades y escándalos, con pinceladas de periodismo sensacionalista, con historias inventadas para ayudar a Trump en las elecciones de 2016 o sobornos en las sombras a Daniels y a otra mujer, la modelo de Playboy Karen McDougal, para esconder sus declaraciones que la vinculaban en citas con Trump en una aventura que habría durado 10 meses, entre 2006 y 2007.

Por su parte, el líder republicano subrayó que el juicio es una maniobra para bloquear su posible llegada a la Casa Blanca en la contienda electoral del 5 de noviembre frente al presidente demócrata Joe Biden.

Pero el caso puede traer fuertes consecuencias para Trump, el fiscal Bragg sostiene que la supuesta coordinación y conspiración entre el abogado Cohen, Trump y los editores de medios que intercedieron para comprar historias negativas sobre Trump y ocultarlas al ciudadano norteamericano, vía prácticas delictivas, resulta en una seria interferencia electoral.

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